Consejos para ahorrar gasolina al manejar
Últimamente todo el mundo está tratando de ahorrar dinero en combustibe, y es fácil ver por qué, ya que los precios de la gasolina cambian muy rápido. Estos consejos te ayudarán a ahorrar gasolina y verás cómo mejoran tus ahorros.
1. No andes con pies de plomo
Mientras más aceleras, más combustible desperdicias. Por esta razón, debes presionar suavemente el pedal del acelerador para ayudarte a ahorrar gasolina. Cuando sigues esta regla general, puedes tener un manejo más eficiente.
Tómate unos 5 segundos para acelerar hasta 15 millas por hora desde una parada, y usa una posición moderada del acelerador y cambia entre 2000 - 2500 rpm si tienes una transmisión manual.
Imagina que hay un huevo debajo del acelerador. Cuando aceleres, piensa que el pedal del acelerador presiona el huevo. Este truco mental puede ayudarte a acelerar de manera segura, además de ahorrar gasolina y dinero en efectivo.
2. Mantén estabilidad para un manejo de bajo consumo de combustible
Si te has preguntado por qué el millaje es diferente cuando manejas en carretera y en ciudad, mira los autos regulares que funcionan con gasolina y verás que el manejo en carretera siempre obtiene la mejor calificación de millaje. Un ejemplo de esto es el Corolla, que tiene un MPG estimado por la EPA más alto en carretera que en ciudad.
Detenerte y avanzar rápidamente puede reducir la eficiencia de combustible, ya que los cambios repentinos de velocidad pueden aumentar tu consumo de combustible hasta en un 30 por ciento en la carretera. Trata de evitar el arrancar y parar de manera rápida si no estás en la ciudad.
El control automático de la velocidad es una herramienta de bajo consumo si vas por carretera o si manejas lejos a diario, ya que ahorra combustible y ayuda a mantener tu auto funcionando bien. Solo asegúrate de seguir las señales de tráfico y apaga el control automático de la velocidad si las condiciones de manejo son peligrosas.
3. Mantente alerta y con una distancia adecuada
Presta atención a la carretera y mantén el impulso de tu vehículo al planificar y anticipar tus maniobras,
además de los movimientos de los peatones y otros conductores, y mantén una distancia segura entre tu auto y el de enfrente.
Trata de contar segundos si no estás seguro de cuál es una distancia segura. Mira un objeto cuando estés en la calle, como una señal de tráfico o algo sólido que no se mueva. Observa cómo el auto frente a ti pasa el objeto y comienza a contar.
Esta regla se llamaba la "regla de los 2 segundos" porque a menudo se aconsejaba contar 2 segundos. Ahora se sabe que hay diferentes tiempos de conteo para diferentes condiciones de manejo.
Los límites de velocidad entre 35-55 millas por hora requieren una distancia de 3 segundos, y 4 segundos para velocidades entre 55-75 mph. Los 4 segundos también aplican cuando llueva, en carreteras mojadas o con mucho tráfico. Para carreteras nevadas y heladas, cuenta de 7 a 8 segundos para un manejo más seguro.
Este consejo puede ayudarte a mantener una distancia adecuada y lograr más rendimiento de gasolina.
Muchos vehículos Toyota también cuentan con control automático de la velocidad con radar dinámico, que es un sistema de seguridad activo diseñado para detectar el auto de enfrente, y que ajusta la velocidad automáticamente para ayudar a mantener una distancia segura.
4. No frenes abruptamente
Las paradas abruptas pueden dificultar el millaje al igual que el manejo en tráfico pesado. Cuando manejas normalmente, es mejor llegar poco a poco a una señal de alto o luz roja en lugar de pisar los frenos, ya que esto ayuda a ahorrar combustible y dinero.
No solo es un buen hábito de eficiencia de consumo, también desgasta menos tus neumáticos y tus frenos, lo cual te ayuda a ahorrar en mantenimiento y costos de reparación.
5. Verifica la presión de tus neumáticos
Asegúrate de mantener tus neumáticos con la presión correcta. Verifica la presión frecuentemente y llénalos cuando veas la luz de advertencia de presión de los neumáticos.
Si no estás seguro de cuánto aire necesitan, mira dentro de la puerta del lado del conductor. Muchos autos recientes tienen una calcomanía que tiene la PSI correcta para tu vehículo. Pero quizás quieras saber más del neumático.
A los fabricantes de neumáticos les gusta poner información útil sobre las llantas, como cuánto PSI pueden aguantar. Pero es importante tener en cuenta que esa cantidad nunca debe excederse.
Esto tiene varias razones, y la primera tiene que ver con el desgaste. Si inflas mucho tus neumáticos, la sección de la banda de rodamiento ser volverá más redonda y esto hará que la banda del medio se desgaste más rápido y podría reducir la vida útil de tus neumáticos a la mitad.
La pérdida de tracción es la segunda razón. Mientras más infles tus neumáticos, más probable sea que pierdan contacto con la carretera, lo que podría llevar a un accidente, y más aún en los meses de invierno cuando las carreteras pueden hacerte resbalar.
Tu viaje es la tercera razón. Si tus neumáticos están demasiado inflados, sentirás todo tipo de impacto mientras manejas y tu paseo será bastante incómodo.
La razón más importante para mantener tus llantas es que la presión de las llantas aumenta a medida que conduces. Supongamos que 44 es el PSI máximo que pueden soportar tus neumáticos. Si revisas las llantas después de conducir, la presión puede ser mucho menor a 44 PSI. Eso es porque el PSI baja mientras el auto se va enfriando.
Tanto así, que el fabricante recomienda que obtengas la PSI cuando tu auto se haya enfriado. La PSI que dice el fabricante del neumático es la que pueden tener los neumáticos en movimiento.
Asegúrate de verificar tu manual del auto para ver más información.
6. Menos carga, más eficiencia de combustible
Si has notado que tu auto funciona mejor después de un viaje largo en carretera, en el que se sintió un poco pesado al principio pero luego se sintió ligero y deportivo cuando lo manejaste por tu casa, hay una buena explicación.
La carga adicional reduce la eficiencia de combustible, por lo que es mejor bajarla cuando llegues a casa, a menos que la necesites, y deja adentro lo que necesites para tu próximo viaje.
7. Combina tus viajes
Si pronto te vas de vacaciones, probablemente tengas que hacer muchos viajes, ya sea para comprar protector solar, toallas adicionales o comer algo, y esto te puede costar en gasolina.
Haz una lista de lo que necesitas y crea la mejor ruta para maximizar tu tiempo y ahorrar gasolina. Combina todos tus viajes en uno solo para un ahorro de combustible óptimo.
Esta estrategia es aún más económica en climas fríos, y calentar el motor de tu auto gasta gasolina y energía. Cuando combinas todos tus viajes en uno, ahorras tiempo en calentar el motor innecesariamente.
8. Cómo ahorrar gasolina durante el verano
Dato: las temperaturas más altas hacen que los autos sean más eficientes en combustible. Un día caluroso ayuda calentar el motor eficientemente y más rápido, y la energía de la gasolina disponible en temperaturas más altas es un poco mejor.
Sin embargo, cuando enciendes el aire acondicionado todos esos ahorros en gasolina se pueden esfumar. Para mantener tus ahorros y una buena temperatura en tu auto, puedes hacer lo siguiente:
Baja las ventanas y no uses el aire acondicionado a bajas velocidades. Esto ayuda a que la cabina se mantenga fresca y escape el aire caliente.
Si tienes que usar el aire acondicionado, intenta usarlo cuando estés en carretera. Abre las ventanas primero para liberar todo el aire caliente, y para que la cabina y el auto se enfríen.
Por otro lado, puedes estacionarte en lugares sombreados para reducir el uso del aire acondicionado, ya que esto mantiene el auto más fresco y cómodo.
9. Reduce el uso de calefacción en invierno
La calefacción y el aire acondicionado se supone que ayuden a mantener el auto cómodo, por lo que muchos tienen aire acondicionado, calefacción y hasta asientos con calefacción.
Para ahorrar gasolina en el invierno, trata de estacionarte en un lugar cálido, como un garaje para evitar el frío y usar menos gasolina para calentar otras cosas, porque la eficiencia de combustible se reduce al depender de los controles climáticos.
Enciende la calefacción justo antes de subirte al auto o mientras el está en funcionamiento, ya que esto acelera el tiempo de calentamiento y ahorra gasolina. Evita dejar la calefacción encendida en un auto inactivo por mucho tiempo.